domingo, 23 de septiembre de 2018

Nicaragua no está normal

Asfixia el ambiente en este país, con más de doscientos muertos, más de doscientos presos políticos, miles de heridos y exiliados, no se conoce cuántos desaparecidos, desempleo, represión y rebeldía en cinco meses de batalla que aún no concluye.

El camino hacia la democracia sigue siendo tortuoso para la sociedad, engendrando ira y rencor, venganza y honor, la misma simbología histórica en las luchas civiles, similar lenguaje y acción. Surgen el matador criminal y el matador justiciero. Ganador y perdedor.

Domina el habla soez, los fusiles empuñados, crueldad en las cárceles, la sangre boyante, la burla y la jodarria enfrentando la muerte como si el escenario bélico fuese una barrera para jinetear toros o ennavajar gallos. Temen a la muerte, pero la desafían aun con el pecho descubierto o con piedras en las manos frente a los disparos.

Por razones políticas, continuamente los nicaragüenses se han matado entre sí. Una inapropiada concepción de “convivencia” en este “suelo amado” de lagos, volcanes, ríos y montañas, que generalmente ensangrientan. Los gobernantes no han sido capaces de crear una cultura de justicia social, paz y progreso.

LOS BRUJOS Y SUS PRODIGIOS DE GUILLERMO ROTHSCHUH VILLANUEVA

Guillermo Rothschuh y Sergio Simpson. En cada uno de sus libros escucho la voz del Guillermo maestro analizando y explicándonos, conduciéndo...