El presidente del Colegio de Periodistas de Nicaragua entre marañas electoreras y desaire a obispo de Matagalpa

Sergio Simpson*

El presidente del Colegio de Periodistas de Nicaragua, Leonel Laguna Caballero, no hizo honor a su segundo apellido, y rechazó la invitación del Obispo de Matagalpa, Rolando José Álvarez Lagos, para conmemorar la “Cuadragésima novena Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales” por la cual el prelado oficiaría la eucaristía y un posterior almuerzo con los hombres y mujeres trabajadoras de medios de comunicación.

Laguna se encontraba en la ciudad, el domingo cinco de junio, para realizar elecciones de directivos departamentales del CPN. A la cita, programada a las nueve y treinta de la mañana, asistieron dieciséis colegiados, más el suscrito quien por represalia fue injustamente expulsado del organismo.

Se le propuso a Laguna que asistiera al evento con la Iglesia Católica a las diez de la mañana, se sometió a votación, y de dieciséis asistentes nueve prefirieron el encuentro con el Obispo y posponer la elección para las dos de la tarde.

Quienes votaron a favor de aceptar la invitación del obispo fueron: Celso Martínez Orozco, Manuel Agustín Mendoza, Juan Carlos Sarmiento, Aurora Leytón Morales, Frank García, Luis Enrique Castrillo, Ninozka Vallecillo, Eduardo Montenegro, Sandra Elena Martínez.

Quienes se quedaron fueron: Juan José Rugama, Orlando Bustillo, Mario Paniagua, Juan Rivas Salazar, Mario Lanzas, Alba Nubia Vargas.

El candidato de Laguna para presidente departamental, es Juan José Rugama, divulgador del Fondo de Inversión Social de Emergencia (FISE), un organismo nacional, con sede en Managua, cuyo presidente es Nelson Artola, Jefe de Campaña electoral del FSLN en Matagalpa, razón por la cual en ocasión anterior Laguna se reunió con periodistas en la casa de campaña del partido.

Mientras la mayoría de colegiados asistía al compromiso con el obispo, Rugama llamaba por teléfono a periodistas y se movía en el vehículo estatal, que tiene asignado, para visitarlos y convencerlos de hacer quórum, incluyendo a dos que habían renunciado al CPN por diferencias personales pero que trabajan en el gobierno, tal es el caso de Kathy Mendoza y Marisol Lanzas; así como al corresponsal del diario La Prensa, Luis Eduardo Martínez, quien además tiene un programa en la católica Radio Hermano, David González quien fue electo presidente departamental en el período anterior y jamás funcionó, a Marvin Jiménez, residente en Sébaco quien nunca ha participado en el organismo, y una joven estudiante de periodismo cuyo nombre desconocemos.

Hasta este momento, ni Laguna, ni Rugama, quien fue electo, han presentado el acta del evento, por lo tanto no sabemos quienes formaron quórum. Sin embargo, tal y como se acordó, después del almuerzo, la mayoría se reunió en el mismo local.

Además de los antes mencionados que a las nueve y cuarenta y cinco de la mañana marcharon donde el obispo, en la Catedral se encontraban Cecilia Matamoros y Hugo Pérez Altamirano, quienes junto a Juan García y Sandra Sandoval, se sumaron a la reunión de las dos de la tarde.

Trece colegiados, y el suscrito expulsado, estábamos cuando llamaron por teléfono a Laguna para que acatara la decisión de la mayoría, pero respondió que ya habían electo directivos. Es decir, en la elección avalada por Leonel Laguna hubo marañas, pero no ética ni legalidad, mucho menos respeto hacia un personaje que no sólo por su investidura, también por su jovialidad en poco tiempo ha establecido relaciones cordiales con el gremio.

Finalmente, aunque no lo quería abordar, me voy a referir a la contradicción de quienes desairaron al obispo, pues se proclaman cristianos, y algunos de ellos por años trabajaron en Radio Hermano, y eran firmes defensores del catolicismo cuando el obispo de Matagalpa fue Leopoldo Brenes.

Se auto llaman “cristianos, socialistas y solidarios” y lo reiteran, a cada instante, hasta que cansan. Es seguro que están, como ellos dicen, con la iglesia que representa el cardenal Miguel Obando y Bravo, aliado de Daniel Ortega, aunque no sé si habrá tal iglesia, y por eso no concurrieron donde Rolando José Álvarez, pero aún así, denotan intransigencia, negación, además, con la proclama danielista de reconciliación.

Varios de quienes departimos, no profesamos religión, y lo sabe el obispo, sin embargo conversamos cordialmente, siendo comunicadores, él como obispo y nosotros como periodistas, buscando puntos de coincidencia por el bien de la sociedad, hubo respeto en la diversidad de opiniones. Pues, es demagogia actuar con marrullas, sectarismo, irrespeto, llamándose revolucionarios, demócratas, cristianos.

*Director

Centro de Comunicación y Estudios Sociales (CESOS)