De sus tres novelas publicadas he leído <“Te amaré por siempre” y “El árbol del amor”>, las parejas fluyen vibraciones impetuosas, sea por contradicciones de carácter o comportamiento que provocan desafectos, asimismo por la atracción que los motiva a fundirse en mente y cuerpo hasta el orgasmo.
Ambas historias de personajes viviendo según los conceptos medievales, el varón tratando de imponerse solicitando la entrega de la joven y la señorita resistiendo para mantener su derecho a casarse con quien ama y no con quien se le asigna.
Los episodios podrían parecer inverosímiles, cuando leemos que la rivalidad o incompatibilidad entre hombre y mujer son superadas al surgir vehemente el mágico deseo erótico.
El instante de ambas miradas emanando del cuerpo un leve aroma intrigante, apenas olido por quienes la pasión les coincide viéndose fugazmente a los ojos y escapan asustados por su tierna apetencia de compartir palabras y besos.
Pero sabemos que
muchas veces tanto del rechazo como de la indiferencia o lo impensable surge la
cercanía y ese anhelo de juntarse en intimidad, el apetito de copular, distante
de la primaria necesidad biológica, embebidos de regodeo coincidentes en ideas.
En los párrafos leemos detalles de juegos sexuales previos, hedonismo entre ambos desnudos, descripciones reales de las pieles sensibles estremeciéndose con las manos acariciándola y los labios húmedos sorbiéndola.
Fascinante imaginar la primera vez cuando la mujer pudorosa abandona prejuicios que la someten, disfruta al máximo su novedosa excitación física y mental, en secreto sufre y goza su acto.
La novelista narra tal cual ese natural incremento de la ansiedad previo al coito: (…) le urgía sentirlo dentro de ella, sentía que él la quemaba con su fuego hasta que no pudo más… <se entrega>.
En occidente, el género romántico prolifera desde el siglo XVIII, aunque siempre hubo manifestaciones artísticas realistas en distintas disciplinas desde las pinturas en las cuevas; incluyendo testimonios de comportamientos aún valorados ejemplos de la perversión humana.
Cientos de historias famosas escritas
por mujeres, evadiendo la censura firma como si fuese hombre, inventa seudónimo
o es el marido quien imprime su nombre como autor, y más desafiante, algunas de
ellas aparecían vistiendo como un caballero.
Mujeres que osan escribir erotismo, sean inventos o vivencias propias, exponen libres sus meditaciones y sentimientos, ciertas <más atrevidas> han referido la dicha con el amante -en secreto- a sabiendas que ella quiere a su marido.
La prosa de Xochitl refiere historias centradas en el amor emocionalmente satisfactorio y optimista. Con base en tres elementos: el encuentro casual entre los personajes, desavenencias tormentosas, y desenlace rebosante.
En el Romanticismo podemos localizar equilibrio inteligente entre la sensibilidad corporal y el entendimiento cerebral, entre lo interior y lo exterior, y por ello adquirió, desde su aparición, un sentido paradójico al impulsar diversas maneras de pensar naturalizando el sometimiento de la mujer hacia el hombre y condenando su liberación amatoria.
Saltando los barrotes, la dama creada por la autora, clama agitada:
<- Por favor, Octavio, quiero sentirte dentro de mí, quiero más de ti.>
Y la novelista no
para ahí, nos conduce a experimentar un acontecer verídico:
<Poco a poco el duque entró dentro de su interior, ella se encontraba húmeda y eso a él le fascinó, sin embargo, tuvo que esperar unos minutos mientras ella se acostumbraba a su miembro grueso y grande. >
Leer las páginas satisface, debido a la habilidad de la escritora mostrando detalles acerca de la memoria enamorada y la efervescencia cotidiana entre dos ávidos de encontrarse; nos mantiene alterados y curiosos, presenta escenas estimulantes de idas y venidas:
<Luego fue complaciendo sus deseos con movimientos más lentos y suaves. Los besos y caricias se intensificaron; gemidos, jaleos y gritos eran las señales de lo que estaba por venir. Después de unos minutos de acción, ambos llegaron al clímax placentero que jamás habían sentido. Terminaron juntos y el duque se vació dentro de ella.>
Matagalpa, 28 mayo 2025.
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